Cómo criar a un niño increíble al estilo Montessori fue uno de los primeros libros para padres que leí y que realmente resonó conmigo. Me hizo ver diferente, más claramente, y fue mi primera introducción al Método Montessori.
El libro lo alienta a ver el mundo desde la perspectiva de un niño, presentándole los hermosos entornos del tamaño de un niño por los que Montessori es famoso en todo el mundo.
Sin embargo, Montessori es más que el ‘ambiente preparado’. Habla de acercar el niño al mundo y el mundo al niño. Estar en la naturaleza, experimentando su belleza, tomando tiempo para observar y recordando siempre seguir al niño; seguir sus intereses y su ritmo.
“La educación es un proceso natural que lleva a cabo el niño y no se adquiere escuchando palabras sino por experiencias en el entorno.”~ Maria Montessori
Una roca cubierta de musgo, el ajetreo de un nido de hormigas, el rastro brillante de un caracol, es en la naturaleza donde realmente podemos experimentar las complejidades de este mundo que nos rodea. Y no es solo el mundo natural; el zumbido de una estación de metro, el sonido del tren al acercarse, el olor, el comportamiento de las personas, todo aprendido en un solo momento. Primera mano. Naturalmente.
Intentamos que nuestros hijos, Jack (4 años) y Sarah (2 años) pasen tiempo al aire libre todos los días. Ya sea un paseo por el monte, un juego junto al arroyo, un paseo junto al lago, geocaching o simplemente en el jardín. Este tiempo que pasan al aire libre es invaluable para su desarrollo. No solo están aprendiendo sobre las muchas maravillas de nuestra área local, sino que también están desarrollando una conexión y un sentido de administración hacia nuestro medio ambiente.
A Jack y Sarah también les encanta este tiempo, al aire libre, siempre hay algo nuevo e interesante por descubrir. Hacen preguntas, coleccionan tesoros, toman fotos, hacen dibujos y simplemente se toman el tiempo para reflexionar.
Así que sal y métete entre los seres vivos. No necesita planear ninguna actividad, solo deje tiempo para mirar y preguntarse.